Ella fue su gran musa… su gran amor, al que nunca se atrevió decir lo que verdaderamente alguna veZ sintió, con la que por una extraña raZón, su coraZón, empeZaba a latir intensamente cuando escuchaba su voZ; por la que sus manos no se estaban quietas y estorbaban, sin saber dónde ponerlas; y por lo
Estás cansado, y te sientes abatido, y sin motivos… tan perdido, que es imposible encontrar ningún camino, tan ilógico que no puedes saber qué es lo que ha pasado… sabes que te estás engañando, cada veZ que te miras al espejo… ves un rostro serio, casi muerto, que intenta disimular que aún tiene sueños, pero
Sin decir nada, escribo palabras, que te gritan y te masacran, hasta hacerte perder esa máscara, con la que te tapas. No muevo los labios, pero mi cabeZa está gritando, estoy solo y no hablo, pero sigo escuchando esa voZ, que soy yo hablando. Tal VeZ no deba escucharlo, tal veZ me esté volviendo loco
Almas solitarias… que caminan sin rumbo… la soledad les acompaña, y sus caras depresivas lloran sangre… en una vida de tonos grises… apenas se acuerdan de los momentos en los que sonrieron… apenas recuerdan porque siguen el sendero a la muerte… pero lo único que no saben es que creen estar solas cuando no lo
Hoy puedo ser el que cause dolor, sin compasi?n, grito a viva voZ, ?qui?n quiere luchar contra este ladr?n, que roba tus esperanZas, y te trae ignorancia? Mam?s, ense?en a sus hijos a pedir, porque lo van a necesitar; no los ense?en a trabajar, a tener responsabilidad, ni a decidir el camino que quieran llevar,
Introducción: * La promesa. CapÃtulo I: El BOSQUE â Ciudad Koiri * IntroduccÃon. * Ciudad Koiri. * Los ni?os crecieron. * Recordando. * Los preparativos. * Comienzos de un guerrero. * El primer combate. INTRODUCCIÃN: La promesa. Entre el espeso bosque, se distinguÃan dos siluetas de lo que parecÃan dos pequeños niños jugando, situados en