Hay dos par…
Millones, en espera… Y sin protección en mis dedos… Todas tú, hasta llegar a ella. ¿Y qué me importa? ¿Y qué te importa? Tengo tantas para cuando vuelvan conmigo, en un cementerio de jardín del olvido… . . . Esperarás, sin yo volver, hasta que el más frío hielo, te enseñe, que mi corazón lo