Llegar
No, no soy yo, es mi interior, que poco a poco, aún en tu silencio, es tu cabeza, que reza por dentro. Te comen por dentro. Hombres lobo, somos, aquellos que rabiosos, incontrolados, crecemos hasta que estallamos… nos vaciamos, y llenamos de suspiros y lágrimas mientras no nos cansamos, somos inagotables, y luchamos hasta morir,