Eau de Société
Nombres a terrenos, dueños de todo tipo de cosas, precio a la libertad, y a la muerte… es simple, esto es un suicidio, complejidad absurda enfrascada en un bote de «Eau de société». Caminas por calles que tienen nombre, por suelos que no son naturales sino de cemento; ver edificios en vez de árboles, coches