Y cuando crees que todo está parado… cuando tu preocupación se extrapola a cosas tan gigantescas que te abruman… cuando la mirada se pierde entre el movimiento del mundo, entre miradas, entre cuerpos… cuando ya no sabes lo que deseas, si llorar o salir corriendo… me siento un autómata escribiendo… me siento un ser solitario
Es tiempo de sentirme vivo por dentro… atrapado en pensamientos… insomnio vuelve cuando te vas… pero es distinto, ahora no me importa no soñar, porque puedo hacerlo contigo… ahora no me importa tardar en abrazar la almohada porque vas aprendiendo a sonreír con la lluvia… a mojarte con tus lágrimas… a abrazar con el corazón…
Algunas veces te sientes como si tuvieras el poder sobre las cosas… otras, te sientes, como si fueras la cosa más pequeña de todas las cosas… y nadie va con cuidado porque no les importa que se rompa… Algunas veces miras por la ventana y te sientes sin fuerzas para luchar por volver a respirar…
Me pierdo entre años, entre pensamientos, entre susurros que lanzo… entre trozos de corazón rotos, entre cachitos de mi alma con nombres escritos, me pierdo entre palabras con nombres y apellidos, con sentimientos que salen poquito a poquito, y me envuelven hasta convertirse en un escalofrío que recorre mi columna y me mata de frío…
Sentimientos salen dispersos, perdidos, del revés, expuestos, perversos, descerebrados, y sin exceso… sentimientos se camuflan con palabras, que son amarradas, entrelazadas, para ser descabelladas, mientras arden en la hoguera que se crea en mi cabeza… pensamientos, se destruyen mientras tu estás durmiendo, perfecto crimen sin huella, delirios de un loco escritos en tinta digital… la
Pienso que es lo que debo, o es lo que tengo… que es lo que me queda después del resto, que es un susurro al viento o que estoy perdido en tus pupilas, que soy un olor que viaja y entra por tu cuerpo, que me siento como un guerrero condenado a tragar sus sentimientos,