Yo me como a las ovejas…
Golpea… te duele la cabeza, no, esta vez no, vuelves a sentarla, es más, te sientas en ella… ¡oh diosa bella!, tú que todo lo destrozas, deja de una vez a este alma muerta, que no habla apenas ni con su conciencia, y que le da pereza relacionarse con la vida externa… pereza, muere cada