Escucho los tictac retumbar, en profundidad, dentro de mi soledad, en oscuridad. Voces vienen y van, versos se quedan sin terminar, hechos se pintan en mi cabeza como real… te vuelvo a ver, lluvia caer, tú, sentado sólo viendo tu mundo derrumbarse, entre un movimiento espásmico, delante atrás… aún recuerdo las palabras de tu madre
Dentro de mi cráneo parece explotar. En pasos por la ciudad, cruzando el horizonte con la mirada al andar… los pasos siempre serán serenos, la puntualidad es mi efecto. La calma, mi mar; que en tempestad no quisieras encontrar… y no hay más, ni menos… simplemente, hay y soy, por los tiempos… que si no
He visto más allá de la luz, y desisto, tras dejar atrás de mí, un vacío. Mientras pasos suenan, días pasan, y no quedan huellas… mientras, suspiros desesperan, y días caen en agendas. Todo queda mientras la ausencia ya no molesta en espera. Todo es nada, y yo no recuerdo el mañana… así que, entre
En actos de silencios, de hechos para avanzar al respecto… en soledad, de avance y respirar; de respirar y andar… el mirar queda atrapado en lo lejos al pensar. Mientras todo carece de verdad… todo se verá. Del papel a la verdad, de las letras o trazos a la realidad… el salto sólo cuesta tiempo,
Sin respuestas ni silencios que molestan… con miradas que no buscan más allá de tus ojos, y que sin embargo, pueden entrar tan profundo que casi son operaciones a corazón… debes saber que tarde o temprano debes aceptarlo, y que lo haces sin darte cuenta, que poco a poco, vas madurando, y no es fruto
¿Qué hacer cuando no sabes qué hacer? Cuando tu vida se escapa día a día y no haces nada… absolutamente nada. Cuando pasan los años, y sigues en el mismo lugar… cuando ni siquiera tú te das cuenta que ya no hay vuelta atrás… y que ya… no podrás andar hacia atrás. Que el tiempo