¿Y tú? ¿Sabes lo que eres?
Muchos días callaron. Y otros cayeron. Otros levantaron. Y muchos se rindieron. Ahora, caminan ahogados, y llorando. Esos lobos siempre fueron solitarios, y el dolor, no les hace daño. Aullamos… hasta llorar por la piel. No quieras ver, los colmillos esta vez. Puedo ser, y seré. No hay duda de qué, pero estaré. Perduraré, tan