Esas pequeñas cosas…
En noches sin adiós… en besos sin despedidas… en cosas tan sencillas, que ya he aprendido a apreciarlas demasiado… Pequeños deseos que muchos obtienen y no saben detectarlos… creer vivir condenado, cuando tu solución es simplemente la espera… hasta odiar el tic tac del reloj, el silencio ensordecedor que taladra tu mente hasta escuchar el