«No quiero comer, no quiero dormir, no quiero respirar, hasta ver lo que mis ojos quieren ver. Y lo único que quiero ver, es a ti dormir, en la maldita suciedad…» Mi mente es sucia, maquiavélica, calculadora y fría, encerrada en pensamientos que me rodean, mi cabeZa se vuelve loca, y las horas son eternas…
Sueños… sueños… sueños… rotos en versos, que ofenden a todos aquellos que esperan algo que les llegue… estoy indefenso… perdido entre los versos que imagino cuando estoy aquí encerrado, acorralado por el deber, luchando contra el esfuerZo y callando mi coraZón que está llorando, mientras mi cabeZa piensa como coordinar todos los movimientos… Piensas que
Esta es mi vida… una sonrisa forZada… ante esa mirada, por la cerradura de la puerta encajada… curiosea y mira que este niño se encontraba llorando en la esquina, mientras tu mirabas… este niño se levanta… y empieZa a golpear la puerta con todas sus ganas… y grita al salir, ser libre al fin… tiembla
Ven, adéntrate aquí dentro… dentro de mi cuerpo… y dame calor… abraZa a mi coraZón y envuélvelo entre besos… besos perdidos junto a los te quieros… puedo susurrarte mientras te beso… puedo darte mil noches… cada una diferente… cada una, el placer de evadirse… Deja que tu cuerpo se una al mío, entre besos, y
Y es que hoy no quiero estar aquí… preferiría no ser lo que soy… pero lo soy… no me quejo… sólo asumo, lo que debo asumir… Siempre ha sido así… a cada cual le marca algo en la vida… yo sé qué es lo que me está marcando, y como un yerro calentado a fuego
Quise llorar… y lloré… hubiera sido algo erróneo querer llorar, no hacerlo, y ahogarme por dentro… quise abraZar la soledad… y la agarré… tanto… que de ella me enamoré… quise aullar… aullar tan fuerte que la Luna cayera sobre la Tierra y en un planeta nuevo se fundieran… entonces, me convertí en lobo… quise apostar