Son dos, uno más uno que tienen la excepción, ciegos de razón, caminan ausentes de su presencia en esta misión, versos que corren de un lado a otro de su expresión, si no soy yo, ¿eres tú la que tienes la voz? No hay signos de compasión en esta pasión de olvidos junto a tus
Tras la oscuridad viene el vacío… Tras el miedo, la ausencia… Tras las ilusiones, la desilusión… Y mientras muero en suspiros… No siento haber ganado, sino perdido… Derrotado y hundido, tras acabar conmigo… He sucumbido tras desaparecer… Y ahora tengo que cambiarte el nombre, y el cuerpo, para tenerte conmigo… Y he decidido… Dejarte ir,
Tan tarde como temprano es el hecho de estar triste… tarde porque ya todo ha pasado y temprano porque todavía me queda mucho… en estos momentos es cuando, me destripo a mí mismo y me hago daño… por no saber lo que está pasando. Estoy sumergido en un bucle infinito del cual no puedo salir,
Si las señoritas no fueran nuestra tortura, poetas no escribirían poemas para ellas… escondemos nuestros secretos bajo llave, nuestras manos golpean el teclado suave, y a falta de ordenador, yo sigo escribiendo con mi letra de niño pequeño… la voz me sigue temblando cuando te hablo, y mi mirada es desviada por la tuya fusiladora,
Sentado en el jardín, he perdido el fin, la mirada se me ha escapado al cielo, y la cabeza se ha tirado hacia atrás, los ojos se han cerrado mientras escuchaba «Ballantine’s», Kase O era el que gritaba cosas que implicaban… y mientras pensaba, la mirada se quedaba fija en algún lugar… he intentado calmar
Un vacío… dentro y fuera de mí… un apagado lento, de mis ganas de vivir… las ilusiones, son un vago recuerdo… la sonrisa, un gesto forzado, y las ganas de hablar con las personas, un hecho truncado… acorralado, me encuentro en un callejón oscuro y con altos muros… golpeo y golpeo, pero sólo consigo hacerme