Sientes el respirar, como si del faltar… he de tratar, cuando ya no sé ni cocinar vientos que tempestades planten delante de tu jardín. Me llevo a mí mismo a un fuerte retroceso y estancamiento, no importa. El ciclo es eterno, y se repite tantas veces como llegue a ser completo. Es o no cuestión de aceptación, creas o no, es así. Y el resto eres tú en el suelo, donde se te han caído hasta los huesos… de las tripas hiciestes tu corazón, y ahí está latiendo, bajo llave en una caja fuerte, alejado de lágrimas y lluvias; de tormentas, que tú cerebro provoca para que tus ojos se conviertan en nubes que chocan… Y mi cuerpo se deteriora, consumido por falta de aire, yo mismo me vicio.

Me privo, de lo que más necesito ahora mismo por imposibilidad… y la impotencia, es lo que resta al no poder hacer nada… me deprimo, al ver que mi vida gira, entorno a eso, que hace que vivo me sienta… en su ausencia, es inevitable ser invadido por ejercitos de penas, que combato con fuerzas, hasta que la noche se acerca… preparados en contraataque, duermo para correr en sueños de lo que me depara el despertar.

Mode: Corriendo en sueños…
Listening: Wallen – A force de vivre