La revelación

Vine del fuego, de los gritos, de las peleas. Vine, de un maltrato que no conocí, hasta que aprendí a verlo. Vine, del dolor, de la frustración, de la pobreza. Vine de lágrimas, de rabia, de golpes, del golpear estas teclas, mientras, ríos caen, mientras… mientras, mi ansiedad me desmantela y me rompe; mientras, mis 

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