No existe el arrepentimiento, sólo es cuestión de tiempo y de lo fuerte que tu mente sepa llevar el peso. Con el tiempo, el horizonte no es que quede más lejos, es que siempre está allá impasible en el tiempo. Los hechos, se acumulan como estrellas en mi pecho, pero, no me reconozco ante el espejo. Qué fue de ese chico que poco a poco fue dejando de ser, para terminar de ser fuerte ante el presente que debe. Muchos desisten, no ofrecen resistencia y se dejan ir por el camino que más fácil deja. Creer que es tuyo, es sólo una consecuencia ilógica de tu realidad inventada, pero luego vienen y en nada te quedas sin nada… y menos, es más de lo que esperabas.

Tu cuerpo realiza un viaje de ida, hacia lo viejo. Tu vida es de no retorno y no pretendas vivir remediando lo que hiciste, porque empezarás a vivir tu pasado. Yo tengo un problema y es que me hago más fuerte con los años. Con el tiempo mi cuerpo se levanta más rápido, se siente tan agotado que es ilógico siquiera que siga hablando pero, a pesar de los pesares que tal vez no comprendas, preferiría cambiar por dolor, esta guerra que mi cabeza ejerce contra mí cada segundo que sola se queda. Soy un titán, de mi propia condena… y no tienes ni idea, de hasta donde pueden llegar mis fuerzas por no perder ninguna de las decisiones que me llevaron a ser lo que ahora mismo ves.

No tengo frenes, ni batallas abiertas, sólo tengo una mirada que no sabe mirar el pasado y que sigue adelante en cada paso.  Deja de vivir en mi pasado.

Mode: «A Dios rogando y con el mazo dando»
Listening: Master – Ayer