Un salto eterno, en el tiempo y en mi vida. Un recorrido extremo, por mis recuerdos. Un eco entre mis versos, mientras los pasos son entre deseos. Tal vez escapo a mi propio entender, y soy silencio. Tal vez, esté tan cansado de todo esto que no tenga otro remedio. Y no me veo, a
Tiempo al tiempo. Y el tiempo se detuvo. Tal vez, la voz que, estoy acostumbrado a escuchar, para otros sea insoportable ya. Qué más da, tú y los demás, cuando no sabes que el tiempo se te va. Tiempo al tiempo dijeron, y eso es lo que obtuve. Tiempo. Y más allá de los segundos,
¿Que pasará cuando la noche se apoderé de ti? Cuando el miedo al que yo no sucumbí venga a por ti. Yo viví, bajo una piel de dolor, que nunca dejé ver. Las consecuencias de aquellos que sacan conclusiones, no me afectan, pero defecan sobre bocas que dejan sus dientes color mierda como sonrisa falsa
Soy resto de mis verdades, de las que soy capaz de aceptar. No veo más allá pero, suelo acertar, contando el tiempo que deja atrás los tic tacs. El silencio es mi paz, y no tengo ganas de hablar. Entre paso y paso ando, en algunos momentos salto, mientras en otros caigo, de consecutivo a
No es suficiente… cuando el silencio se extiende, en noches crecientes. Conociste sólo el agotamiento como cura, pero… la locura, es el paso a la calma que precede mis pasos. Llego a ser arrojado por tantos acantilados cuando la mirada desde lo alto, divisa lento el pasar del tiempo hasta el horizonte donde se esconden
Morimos en noches, agotados y pensando, en un mañana mejor. Entre movimientos de un lado a otro de la cama, vivo yo, y busco en sueños lo que en noches eternas no encuentro. Amanecer así, sin saber donde mirar, sin entender más allá del sol que asoma por entre los árboles… lleno mi vida de