Regalo…
Entre ropas, tu cuerpo, cubriéndolo como objeto de deseo, con sonrisa como lazo, regalo de la vida, tus besos, que se funden con mis labios y me funden el cerebro… susurros lanzados como motivos para seguir a tu lado, miradas que dejan cautivo a mi corazón entre tus brazos… dolor soportado por ambos, sonrisas duplicadas para disfrutarlo… caminos separados pero que avanzan al unisono cada vez con pasos más fuertes que quedan marcados en el suelo… y seguimos avanzando…
Cuando mi fin es la muerte, tu meta es correr y correr… cuando mi visión es negra, donde soy luz que ciega… tu eres ciego… yo, el juego, del escritor de versos que quedan aquí inscritos… ya no somos niños… pero seguimos teniendo ese recuerdo que siempre quisimos… pero yo no quiero volver a ser niño… y es ahora cuando la razón se difunde por el hombre y acapara cada poro de mi piel, para traer más problemas a este ser… ya la locura es irreversible… incurable… la enfermedad de relacionarme… y tal vez no entiendan que yo no estoy echo para nadar en la tierra… porque la verdad es que esta sociedad es la que poco a poco te condena al olvido, y te procesa… y tú, sólo quieres, esa tarjeta… asocial por naturaleza, no molestar…
Pero un idiota es aquel que hace de la vida una gilipollez, y cree que es el señor don, donde su corona es de oro mejor que cualquier otro, donde eres rey por autoimposición, y el que no sea de tu don… no es bien recibido al camino de los dones… pero… tu crees que eres rey y eres pobre, pobre de mente sin solución, castigado por tu propio ser, morirás sin disfrutar… yo sé, lo que debo saber… pero no voy de más…
Pero… esto es un juego no de estrategia, aquí no gana el que más fichas buenas tenga… mi peón se comerá a tu reina, aunque no lo creas… volveré a la oscuridad… y encontraré tu cuerpo desnudo sin más que cubra… sólo tu piel para disfrutar… no merece nada más, que la imagen de tu cara justo al marchar… no necesito más… sólo, la certeza, de que volverás a ocupar esa imagen…
Mode:Cansado…
Escuchando:La Llorona y Violadores del verso