Sientes el poder, sientes la compasión, hasta que sacan tus lágrimas… sientes que tu visión de la vida cambia, pero mañana… ojalá despertaras, con más ganas. Promesas de año, nuevas esperanZas, que se pierden a la segunda mañana, y cuesta tanto seguir con lo que tu cabeZa había pensado… y así continúas con tus andanZas…

Llega un momento en el que sientes asco, que eres muchas propuestas, que se pierden… y tu mismo te mientes, hasta darte cuenta que no es tan fácil, hasta que te lo prometes…

…empeñarse en morir o empeñarse en vivir…

Una frase, que para tí separa dos formas de vivir, una frase que se ataca, y piensas ¿cómo puedes sonreir cuando ahí fuera todos te atacan..? hasta que te cansas. La miras y te sobran palabras, pero una parte sin la otra no son nada… ¿llorar o sonreir?, nunca puedes quedarte ahí, no puedes elegir, no puedes descartar una, porque van juntas… deberías cambiar la o por la y… y así, no tener que elegir, pero tampoco es así, no quiere decir que no puedas elegir, tampoco que lo tengas que hacer así… sólo que el tiempo dicta para ti, y pasa lento o rápido según el momento… y lo que jamás habías pensado, es que siempre hay momentos malos, muy malos… por mucho que quieras ignorarlos… pero a la veZ estan esos pequeños momentos en los que te arrancaron una sonrisa, como si te la hubieran robado, y llevado consigo todo lo malo… esos momentos, si lo piensas bien, también siempre han estado… se van turnando, pero es ilógico controlarlos.

Por eso, continuamos levantandonos, y intentando ignorar que tenemos que elegir cuando…

Escuchando: AZ – Sosa
Después de ver: Cadena perpetua (1994) – Tim Robbins, Morgan Freeman
Mode: Insomnio